Llega un momento de la vida en que debes alejarte del drama sin motivo, y de la gente que lo provoca, RODEÁDOTE DE PERSONA QUE TE HACEN REIR TAN FUERTE QUE TE OLVIDÁS DE LO MALO Y TE ENFOCÁS SOLO EN LO BUENO; que te tratan bien porque te quieren y arreglan las cosas hablando. Porque resulta ser que un día aprendí que la vida es demasiado corta como para hacer otra cosa que no sea ser feliz.